Paloma Yb Libros Populares

Paloma Yb Biografía y Hechos

El término memoria semántica hace referencia a la memoria de significados, entendimientos y otros conocimientos conceptuales que no están relacionados con experiencias concretas. Se considera que la recolección consciente de información sobre hechos y el conocimiento general sobre el mundo es independiente del contexto y la relevancia personal.[1]​ La memoria semántica y la memoria episódica conforman la categoría de memoria declarativa, una de las dos divisiones principales de la memoria. La contraparte de la memoria declarativa o explícita es la memoria procedimental o memoria implícita.[2]​ La memoria semántica incluye a todos aquellos conocimientos generales que no implican el recuerdo de sucesos concretos. Por ejemplo, para responder a la pregunta de si la llave inglesa es una herramienta o un instrumento musical, no es necesario evocar ningún suceso concreto de la vida en el que se haya adquirido ese conocimiento. Historia La primera vez que se mencionó el concepto de memoria semántica fue en una conferencia sobre memoria humana impartida por Endel Tulving, de la Universidad de Toronto, y organizada por W. Donaldson en 1972. Tulving realizó una propuesta de distinción entre la memoria episódica y lo que denominó "memoria semántica". Estaba influenciado principalmente por las ideas de Reiff y Scheers, que en 1959 habían realizado una distinción entre dos formas de memoria, a las que denominaron remembrance (remembranzas, recuerdos) y memoria, respectivamente. El concepto «remembrance» se refería a aquellos recuerdos que contenían las experiencias autobiográficas, mientras que el concepto «memoria» aludía a los recuerdos que no correspondían a este tipo de vivencias. En este mismo sentido, la memoria semántica hace referencia al conocimiento del mundo circundante. Contiene información genérica que se adquiere más bien a través de varios contextos, y puede ser utilizada en diferentes situaciones. De acuerdo con Madigan en su libro Memory, la memoria semántica es la suma de todos los conocimientos adquiridos, ya sean vocabulario, entendimiento o matemáticas, y todos los hechos conocidos. El uso de la memoria semántica difiere considerablemente del que se hace de la memoria episódica, ya que se refiere a hechos y significados generales y compartidos con otros, mientras que la memoria episódica se refiere a experiencias personales concretas y únicas. La propuesta de Tulving de distinguir entre memoria semántica y episódica fue ampliamente aceptada, ya que permitía establecer una separación en la conceptualización del conocimiento del mundo. Tulving explica estos sistemas diferenciados de conceptualización en su libro Elements of episodic memory. Aquí establece que ambos tipos de memoria se diferencias en varios aspectos, entre los que se encuentran: las características de sus operaciones la clase de información que procesan, y sus aplicaciones al mundo real, así como en el trabajo de laboratorio. Antes de que Tulving realizara esta propuesta, este aspecto de la memoria humana no había sido considerado por los psicólogos experimentales. Varios experimentadores han dirigido diversas pruebas encaminadas a determinar la validez de esta diferenciación entre memoria episódica y memoria semántica. Pruebas empíricas Kihlstrom et al. (1980)- Experimento 1 En este estudio[3]​ se hipnotizó a cuatro grupos de estudiantes universitarios con niveles variables de susceptibilidad hipnótica. Estando bajo los efectos de la hipnosis, aprendieron una lista de 16 palabras comunes a través de varios ensayos de recuerdo libre. Una vez que los sujetos ya eran capaces de recordar perfectamente la lista dos veces en orden, se les dijo que cuando despertaran del trance hipnótico no recordarían nada de lo aprendido bajo esas circunstancias. No obstante, no sólo eran capaces de recordar el hecho de haber sido sometidos a una prueba de memorización, sino que también recordaban la lista concreta de palabras aprendidas. Durante la primera fase del experimento (después de que los sujetos despertaran) se utilizó el número de palabras que los sujetos podían recordar como una medida del rendimiento para una tarea de recuerdo episódico libre. La mayor parte de los sujetos era capaz de recordar la lista completa de palabras. Durante la segunda fase, se evaluó el rendimiento de la memoria semántica. Cada sujeto fue sometido a una prueba semántica de asociación libre en la que se presentaban determinados estímulos elicitadores de las palabras aprendidas. Como se ha dicho, los sujetos presentaban distintos niveles de susceptibilidad hipnótica, según se había determinado mediante sus puntuaciones en la escala de susceptibilidad hipnótica de Stanford, y estaban agrupados homogéneamente en función de estos resultados. Los resultados obtenidos en las tareas de asociación semántica libre fueron relativamente similares en todos los grupos, mientras que los obtenidos en la tarea del recuerdo episódico libre varió significativamente: el porcentaje de acierto aumentaba a medida que decrecía la susceptibilidad hipnótica. Los sujetos con alta susceptibilidad apenas eran capaces de recordar nada, mientras que aquellos con niveles medios o bajos de suscetibilidad hipnótica fueron capaces de recordar el 86% de las palabras. Dado que la prueba de asociación semántica libre no mostró relación alguna con el grado de susceptibilidad hipnótica, mientras que la prueba de recuerdo episódico libre sí lo hizo, estos datos pueden interpretarse como una prueba de la validez de la distinción entre memorias episódica y semántica propuesta por Tulving. Jacoby y Dallas (1981) Este estudio[4]​ no fue pensado para proporcionar pruebas de la distinción entre los almacenes de memoria episódica y semántica. No obstante, utilizaron un método experimental de disociación que proporciona datos en favor de la hipótesis de Tulving. En la primera fase del experimento, se les presentó a los sujetos una lista de 60 palabras (una por una), y a continuación se les realizó una serie de preguntas. Algunas de las preguntas realizadas estaban pensadas para que los participantes prestaran atención a la apariencia "visual" de la palabra; por ejemplo: «¿Está escrita en negrita esta palabra?» Algunas preguntas estaban pensadas para centrar la atención en el sonido de la palabra: «¿Rima con camión?» Algunas preguntas se centraban en el significado de la palabra: «¿Hace referencia a una forma de comunicación?» La mitad de las preguntas estaban formuladas en forma positiva, y la otra mitad, en forma negativa. En la segunda fase del experimento, se presentaron conjuntamente las 60 palabras ya presentadas en la primera fase, y 20 palabras nuevas. Los sujetos debían realizar una de las siguientes tareas: Tarea de identificación perceptiva (semántica): las palabras se mostraban en una pantalla de video durante 35 milisegundos, y los sujetos debían identificarla. Tarea de reconocimiento episódico: mediante el mismo mecanismo de presentación, los sujetos t.... Descubre los libros populares de Paloma Yb. Encuentra los 100 libros más populares de Paloma Yb

.

Best Seller Paloma Yb Libros de 2024